Buenas tardes profesores, compañeros, Braulio, todos.
Siento mucho honor de poder compartir con ustedes estas palabras, y lo digo en serio, no siempre uno tiene la oportunidad de estar delante de tan distinguido grupo.
Somos parte de las primeras promociones de Ingeniería de la UdeP en Lima, un nuevo reto de la universidad, casi como un primer hijo, con aciertos y defectos, pero con ese amor único que se siente por el primerizo.
Lo peor que nos pudo haber pasado es que la Universidad solo haya durado 5 años. No me malinterpreteten, me refiero a que si hubiera sido así, terminando la carrera cada uno hubiera seguido por su lado y no existiría esta gran amistad que se tiene entre nosotros, menos aún estaríamos reunidos. Tenemos que entender que la universidad no solo dura los años que estudiamos acá, sino que trasciende y se proyecta para el resto de nuestras vidas.
Estimados cumpliendo 10 años de egresados, 10 años desde el último examen que dimos!!! ¿Recuerdan cuál fue? ¿Si se fueron a susti? ¿Si hubo reclamo? Pero la duda más grande que tengo, y sean sinceros, ¿alguien aplica algo de electrotécnia hoy? La universidad nos dio una gran base y nosotros tomamos vuelo y seguimos aprendiendo.
Se acuerdan si hace 10 años pensaban estar como están ahora? Algunos están ya casados, con hijos, otros en plena espera (Bure), otros en vías de matrimonio y otros felices (no, mentira), cómo hemos cambiado, y no solo nosotros, sino la UdeP también, espero que todos para bien.
Pero no es solo 10 años de egresados. Si hacemos cálculos, dependiendo de la “promo”, los que estamos aquí por lo menos nos conocemos 14 o 15 años. Me atrevo a decir que tenemos 31 años en promedio, ojo, sin contar a Piero ni a Hiroshi. Esto quiere decir que nos conocemos ya casi media vida, palabras fuertes pero reales.
Pasamos gratos momentos en la U, el primer campeonato de Olimpiadas fue con ayuda de la 2006 (gracias negro por dejarte pegar). El viaje a Piura que hicimos, disque para un curso pero era como un viaje de promoción. La celebraciones de los campeonatos, la argolla para olimpiadas, cuando se escapaban de la clase de Isabel Chiyón para jugar voley, o esa ves que les dijo “ya les he enseñado varías veces y ustedes no MEJO…..RAN”. Cantar el “oh Campana…” en las calles de la pizzas, el “¡VAMOS JARRÍN!”, las amanecidas juntos, algunas en Sama, el baile de Triller, el del YMCA, cuando vinimos desde el Terrazas hasta la UdeP, saltando y gritando,… innumerables que se nos iría el tiempo recordando.
Pero no todo fue color de rosa en la Universidad. Esto lo dejo a criterio de cada uno.
De cierta manera la UdeP nos ama, y no hay que confundir amar con ser buena gente, porque cuando alguien ama, te corrige para bien. Es por eso que no regalaban nota (salvo casos contados), nos exigían lo mejor de nosotros y a veces claro, nos “castigaba” con la bica.
La UdeP nos ha dado más que un cartón. Nos ha dado amigos para toda la vida, también a muchos nos dio una chapa (creo que acá no hay alguien que no tenga una). A otros incluso algo más cercano, les dio el esposo o la esposa que tienen, claro ejemplo de esto es el Negro y Chifón, que si no fuese por la Universidad, no sé si pudo haber forma de que se conocieran, o Chan con Majo, El Poste y Ale Coz… y así la lista continúa.
Creo que mucho más que conocimiento, nos llevamos experiencias, esas historias que contamos en las reuniones y que también compartimos con la gente de nuestra chamba, esas que seguimos escribiendo en algún viaje o salida que hacemos en grupo.
Somos una generación que pasó por una transcición grande, comenzamos con el mi.ing y terminamos con el Siga, teníamos Hi5 y terminamos en Facebook, vimos morir a Microsoft Messenger y como otras personas dejaron de ser Emos.
Sigamos con el esfuerzo de ser mejores, de aportar al planeta y de tratar a la personas como lo que son… personas.
Les deseo los mejores éxitos en la vida, que sigan creciendo como personas y como profesionales, que no nos apartemos como amigos y que siempre recuerden sus raíces udepinas.
Para ir terminando quisiera agradecer a los profesores, a los organizadores de la UdeP y a la comisión del evento por parte de los egresados: Chuky, Gazú, Maclau, Bure, Braulio, Melody y Crika.
Para cerrar, gracias a todos los que se dieron un tiempo en venir, espero que pasen unas felices fiestas rodeados de su familia. Ingeniería no solo una carrera, es una pasión. Muchas gracias.